PROYECTO DE PASTORAL

PRINCIPIOS GENERALES

1.- ¿Qué es la Pastoral Trinitaria?

El Espíritu Santo, a través de Nuestras Madres Fundadoras, regaló a la Iglesia un don: la escuela trinitaria. Constituida en obra de la Iglesia y en plena comunión con ella, los trinitarios: religiosas y laicos, somos partícipes de su misión evangelizadora por medio de la educación integral de niños y jóvenes, sobre todo de los más necesitados. Más todavía: creemos que sólo tenemos razón de ser por el ministerio de la evangelización que se nos ha encomendado desde el origen de nuestra fundación hasta la actualidad.

Esta profunda identidad de la escuela trinitaria nos lleva a pretender como finalidad de toda nuestra actividad pastoral la educación en la fe de nuestros niños y jóvenes. Desde el marco de una educación integral, que se inspira en una concepción cristina del ser humano, de la vida y del mundo, buscamos la síntesis fe-cultura-vida.

Por ello, la actividad pastoral (pastoral educativa) con su organización y dirección, pertenece a la identidad de nuestros colegios trinitarios, que son Centros de la Iglesia Católica. Aunque acogemos a todas las personas con sus opciones de vida, nuestra oferta no pretende ser ambigua ni neutra, ya que explícita e intencionalmente opta por el crecimiento y maduración del ser humano a imagen del hombre nuevo: Jesús de Nazaret, el hombre libre, en el cuál cobran sentido pleno todas las realidades humanas.

Por eso concebimos la pastoral trinitaria como el proceso de Evangelización que orienta a la formación integral de la persona, través de acciones que posibiliten vivenciar los valores del Reino, iluminados desde el carisma trinitario: el amor y la liberación.

Sabiendo que Jesús está con nosotros en su Palabra, en la Eucaristía, en el hermano que sufre, en las alegrías cotidianas…… y de otras formas…….. como Él nos prometió: “Yo estaré siempre con ustedes” (que nos ayudan a encontrarlo y nos fortalecen en el camino); por eso nosotros debemos conseguir una historia más justa, alentándonos unos a otros para no desanimarnos en el trato frecuente con el Resucitado pues es el manantial vivo que nos sostiene.

Entendemos que el crecimiento y maduración de la fe se hace desde una comunidad por eso intentamos vivir en fraternidad cuando oramos juntos, dialogamos, trabajamos, compartimos la vida, planificamos…. ya que esto nos proporciona el conocimiento que nos permite valorarnos y apreciar la unidad desde la riqueza de la pluralidad, en la diversidad de vocaciones, carismas y ministerios. Y, cuando caemos en la tentación de hacernos daño, ella nos mueve a optar una vez más por el don de la reconciliación.

2.- Finalidad 

La finalidad de nuestra tarea educativa, por tanto será lograr la unidad y coherencia en la tarea evangelizadora de todo el proceso educativo para formar un hombre y una mujer libre y responsable.

3.- Principios inspiradores de nuestra pastoral

1) Educamos desde una determinada visión del hombre y del mundo: integral, abierta a lo trascendente, ética.

2) Educamos desde una determinada visión de escuela: Comunidad Educativa, Familia Trinitaria.

3) Educamos desde una determinada imagen de Dios: El DIOS TRINIDAD.

4) Educamos desde un determinado estilo: El de NUESTRAS MADRES FUNDADORAS.

5) Promovemos la educación en valores:
a) Educamos en la libertad y para la libertad
b) Educamos para el respeto, la tolerancia y la paz
c) Educamos para la justicia y la solidaridad
d) Educamos para la fraternidad, el servicio y la gratuidad
e) Educamos para la comunión desde la diversidad
f) Educamos para el diálogo fe-cultura-vida
g) Educamos para la acción social
h) Educamos el trabajo como medio de maduración-realización personal de crecimiento en responsabilidad y servicio a los demás.

4.- Fuentes en la que se inspira 

1. No hemos recibido una formación común y única, tampoco hemos participado en las mismas experiencias; confesamos sí la misma fe, pero todos sabemos que admite matices, incidencias, acentos, que le permiten presentarse con una gran diversidad: pluralidad de tendencias, grupos, de opciones.
2. Teniendo en cuenta los carismas personales, que dan riqueza y son necesarios al conjunto, nuestra pastoral trinitaria quisiera tener una identidad, un estilo, unas maneras de hacer y de sentir, que manifiesten realmente nuestra comunión en los diferentes lugares y obras. Reconocemos que es algo que está por hacer en buena parte y que es un reto de futuro.
3. Caminar hacia ese objetivo supone poner manos a la obra: acercarnos a beber del mismo pozo; pensar y dialogar en voz alta, confrontando cordialmente las diferencias; caminar hacia una sensibilidad común en la oración y en la celebración de nuestra fe; estudiar juntos las mismas fuentes, enriqueciendo nuestras concepciones teológicas y pastorales; colaborar y participar en experiencias comunes de fe y servicio; llevar adelante los mismos proyectos….
4. Los núcleos de referencia generadores de comunión e inspiradores de nuestra acción pastoral creemos que podrían ser:
   a. El evangelio como alimento de nuestra propia fe personal y comunitaria. La lectura asidua de la Palabra, su escucha y meditación, su proclamación.
5. Presentar el evangelio de Jesús como una oferta humanizadota de felicidad que viene a llenar de sentido y transformar las actitudes más profundas del corazón humano.
6. Posibilitar experiencias personales y comunitarias de encuentro, relación e interiorización, con el misterio de Dios, revelado y presente en la persona de Jesús, a través de sus mediaciones.
7. Ofrecer caminos de seguimiento, crecimiento y maduración de la fe, integrados en los mismos procesos educativos, que les abran a una búsqueda y enriquecimiento continuos en el futuro, hasta desembocar en la comunidad cristiana adulta.
8. Introducir inicialmente en la Iglesia, como Comunidad de creyentes que vive un modo nuevo de relación: la fraternidad.
   a. manera de hacer presente a Jesús y permitir su acción liberadora.
   b. La liturgia, en sus diversas formas, será también punto de encuentro de nuestras experiencias y valoraciones. Viviremos y enseñaremos a vivir la celebración de la Fe que nos salva, cumbre y fuente de la vida cristiana.
   c. La Palabra Magisterial de la Iglesia, acogida siempre con respeto y amor será objeto de reflexión y estudio y haremos hincapié, por su especial incidencia en nuestra misión en:
   d. El Concilio Vaticano II,e. El Catecismo de la Iglesia Católica
   f. Los documentos Pontificios
   g. Los documentos de la Congregación para la Educación Católica
   h. Las orientaciones de nuestra Arquidiócesis de Córdoba
   i. Los escritos de nuestras Madres Fundadoras
   j. Documentos de nuestros colegio.
9. La valoración y el acercamiento a todas las llamadas ciencias humanas y sociales, que nos permitan un mejor conocimiento del hombre y la sociedad de hoy, así como de los ejes fundamentales que sustentan su pensamiento y actuación: pedagogía, psicología, sociología, antropología, ética civil, ciencias de la comunicación……El periódico, el cine, la literatura, la televisión…, como lugares donde tomar el pulso a nuestra gente. Las manifestaciones culturales que expresan o configuran la identidad de los pueblos a los que servimos y de los que formamos parte ( lengua, religiosidad, costumbres, sensibilidades sociales, fiestas, etc.)

5.- Criterios 

1. Nuestra escuela asume la dimensión religioso-cristiana del hombre al promover el crecimiento integral del alumno:
   a. Educamos en la libertad y para la libertad mediante una educación que desarrolle la decisión responsable del hombre.
   b. Ofrecemos un espacio educativo que favorezca la maduración en la libertad, respetando la libertad de los demás y actuando con convicción propia y responsabilidad.
   2. Tratar de cultivar el estilo de vida propio de las fundadoras: sencillez, alegría, honradez, serenidad, servicio y espíritu de trabajo.
   3. La comunidad educativa cristiana es fruto de la integración armónica de los distintos estamentos: alumnos, profesores, padres y personal no docente unidos por una misma tarea educativa, para que todos podamos considerar la escuela como algo propio, obra y responsabilidad de todos.
   4. Fomentar la solidaridad con los pobres, comenzando por los más próximos.

6.- Opciones fundamentales 

1. Promover la práctica de aquellos valores que sustentan la comunidad educativa (sería conveniente explicitarlos)
   2. Educar de manera que favorezca la autorrealización hacia una libertad responsable.
   3. Realizar una pastoral educativa abierta y atenta a las necesidades que demande la comunidad.
   4. La comunidad apoyará y orientará los emprendimientos de compromiso social que surgen de sus miembros.
   5. Promover el diálogo, creando un clima de armonía fraterna.
   6. Impulsar la educación para la justicia, la solidaridad y la paz.

REALIDAD DE NUESTRA COMUNIDAD EDUCATIVA

1. El claustro de profesores
   a. Falta de diálogo
   b. Carencia interna de valores
   c. Ausencia de experiencia de fe
   d. Incoherencia entre el decir y el hacer
2. Los alumnos
   a. Falta de afecto
   b. Carencia de contención
   c. Falta de motivación
   d. Falta de ideales, sueños, metas, utopías
   e. Individualismo
   f. Conflicto interno por el doble mensaje escuela-familia
   g. Sin sentido de pertenencia
3. La sociedad
   a. Los valores de los padres son diferentes a los del Colegio
   b. Dependencia de los medios de comunicación
   c. Ausencia de proyecto de vida
   d. Falta de conocimiento de la realidad educativa
   e. Alta de creencias religiosas
   f. Ausencia de imagen de autoridad
   g. Influencia negativa de lo material y lo estético como prioridad.
4. La situación fe y vida
   a. Falta de creatividad y empuje para todo el proceso de evangelización
   b. Falta de formación religiosa y coherencia entre la práctica docente y los valores evangélicos.
   c. Se atiende más a lo inmediato y a la urgencia que al conocimiento mutuo de cada uno de los miembros de la comunidad.

OBJETIVOS DE NUESTRO SERVICIO PASTORAL

1.- Objetivos generales:
Siempre que participamos en la misión evangelizadora de la Iglesia, que es también nuestra, mediante cualquier intervención pastoral a favor de la educación integral de niños y jóvenes, tenemos los siguientes objetivos:

Acoger, amar y educar a cada niño/jóven en su singularidad, haciendo cercana la presencia de Dios, suscitando y dignificando todo crecimiento humano.
Trabajar en la aparición de un nuevo tipo de persona que integra la fe y la vida, inspira su existencia en los valores del Evangelio y adquiere una conciencia crítica y activa que le permite ser semilla de una nueva humanidad.

2.- Objetivos específicos

1. Planificar la acción pastoral concreta que promueva la iniciación cristiana.
2. Desarrollar la educación en la fe como un proceso a tres niveles:
   a. Personalización
   b. Diálogo fe-cultura
   c. Optar por una comunidad cristiana: vivir el Evangelio entre todos los miembros de la comunidad educativa
3. Ofrecer las acciones pastorales en un clima de progresiva libertad pero con responsabilidad y compromiso
4. Formación religiosa
5. Propiciar la coherencia entre el hacer y el decir.
6. Evangelizar desde el diálogo intercultural e interreligioso.

PRINCIPIOS METODOLÓGICOS

1. Realizar una pastoral que conecte con la vida del alumno: partiendo de sus necesidades, intereses y preocupaciones.
2. Utilizar el método empleado por Jesús en el camino de Meaux: tomar la iniciativa del encuentro, hacer el camino escuchando y compartiendo sus anhelos, explicar con paciencia el mensaje de Jesús, reunirnos con ellos para compartir la Palabra y el Pan y suscitar en ellos l ardor de la fe.
3. En las situaciones de aprendizaje considerar a los alumnos como sujetos activos, evitando, en cuanto sea posible, darles contenidos elaborados y fomentando la búsqueda y el descubrimiento, a partir de sus propias experiencias y acontecimientos diarios.
4. Cuidar especialmente la relación personal de acompañamiento, animando a que cada uno actúe por convicción propia y no porque el ambiente les obliga.
5. Lograr una síntesis entre fe-cultura-vida actuando con coherencia entre el decir y el hacer.
6. Educar para la libertad y la tolerancia con respeto a la diversidad, creando un ambiente que propicie la acción evangelizadora.
7. Valorar el esfuerzo personal según la capacidad de cada uno, fomentando la justicia.
8. Preparar a los alumnos para ser defensores y constructores de un mundo práctico, favorecer la convivencia y el respeto entre todos.
9. Tomar la Comunidad y lo comunitario como fuente, camino y meta de todos nuestros esfuerzos pastorales.

CONTENIDOS DE NUESTRA PASTORAL TRINITARIA 

1. Profundizar el Evangelio
   2. Profundizar el Ideario
   3. Profundizar el PEI
   4. Documentos de la Iglesia
   5. Concepto de persona libre, responsable y trascendente
   6. Síntesis de fe-cultura-vida
   7. Proyecto del Laicado Católico testigo de la Fe en la Escuela

CAMPOS DE ACCIÓN DE NUESTRA PASTORAL

1. La formación permanente de todos los agentes (docentes, alumnos, padres, personal no docente).
2. Generar espacios para el conocimiento mutuo, compartiendo experiencias que favorezcan el trabajo en equipo.
3. Celebraciones de la fe como comunidad educativa.
4. Cuidar el mensaje de los gestos y símbolos.
5. Organizar momentos periódicos y significativos de celebraciones de la Palabra, Penitenciales y Eucarísticos con la participación de toda la comunidad educativa.
6. Fomentar el diálogo y el acercamiento entre los miembros de la comunidad respetando la diversidad.
7. Desarrollar actividades pastorales que permitan al alumno y su familia reflexionar sobre su realidad familiar y su proyecto.
8. Educar en y para el trabajo en equipo.
9. Realizar un programa de educación en valores que conlleve la selección e inclusión de los mismos en el PEI/PPI y la educación progresiva en cada uno de estos valores y en diferentes áreas a través de campañas específicas para profundizar o promover determinados valores.
10. Realizar convivencias, encuentros, jornadas y retiros.
11. Llevar a cabo un plan de educación en la justicia social y en la solidaridad.

SOPORTE ESTRUCTURAL 

1. Plan de formación en el lenguaje simbólico, desarrollo y programación de los diferentes momentos de una Celebración.
2. Programa de despertar, proponer y acompañar vocacionalmente a los alumnos, dado que todos tienen derecho a recibir una sólida orientación vocacional (en clase, en grupos cristianos…) abierta a todos y especialmente para los que manifiesten una inquietud determinada.
3. Diseñar un plan de estrategias para el conocimiento mutuo, aunar voluntades y asumir responsabilidades en torno a un proyecto evangelizador común.
4. Trazar líneas de colaboración